Oclusión de puntos lagrimales con tapones

La oclusión de los puntos lagrimales es una medida no farmacológica muy útil en el manejo del ojo seco, moderado a severo, que no ha mejorado con la medicación apropiada; Requiere seguimiento a largo plazo y control por el especialista tratante.
Existen dos tipos de tapones:

  1. Temporales o reabsorbibles, nos permiten valorar la respuesta de la superficie ocular a la oclusión de los tapones definitivos. Pueden tener una duración entre 2 días a 3 meses según el tapón que se escoja.
  2. Definitivos no reabsorbibles, en términos generales tienen 3 partes:
    1. Cabeza cónica,
    2. Cuerpo cilíndrico, acanalado o cerrado,
    3. Un sombrero.

Los laboratorios han realizado numerosas modificaciones, su oftalmólogo escoge el que más se adapte a su caso.

Los tapones vienen en un dispositivo de colocación, en varios tamaños, su oftalmólogo realiza la selección de este.

Los tapones deben ser colocados por su oftalmólogo, quien debe realizar el seguimiento. Se han descrito complicaciones como la pérdida del tapón, sobre infección o migración.

Cuando los tapones se pierden en forma consecutiva existe la opción de realizar el cierre definitivo con varias técnicas.

Ir al contenido