Fractura orbitaria

La órbita ocular es la cavidad de hueso en el cráneo en donde se aloja el ojo. Un trauma facial o en la órbita puede llevar a una fractura en uno o varios de los huesos que componen la órbita. Una fractura orbitaria puede producir desplazamiento hacia adentro del ojo, haciéndolo ver más chico, restricción de los movimientos oculares, visión doble, desplazamiento hacia abajo del ojo, deformidad, y en niños puede potencialmente ser de gravedad mortal por atrapamiento de un músculo en la fractura, bradicardia refleja y paro cardiaco.

Para evaluar la fractura se requiere de un examen oftalmológico completo, valoración de los movimientos oculares y estudios de imagen diagnóstica y dependiendo de la localización y extensión de la fractura se determina si requiere o no cirugía y el tipo de cirugía. En casos en los que se presentan múltiples fracturas en los huesos de la cara se requiere de un manejo interdisciplinario entre varios especialistas según los huesos comprometidos (oculoplastia, cirugía maxilofacial, neurocirugía, otorrinolaringología).

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